Los trabajos provocan que pasear varias veces al mes por un bosque fortalece el sistema inmunitario del hombre. Se incrementa el vigor y se reducen los niveles de ansiedad, depresión, angustia y fatiga. Además de mejorar el sistema cognitivo. El caminante del bosque, además, puede inhalar las denominadas fitoncidas, sustancias volátiles y no volátiles producidas por plantas y árboles. Una suerte de aromaterapia natural in situ, que relaja y activa el sistema inmunitario.

En definitiva, el organismo humano interactúa con el entorno a través de los cinco sentidos(y más), además de los distintos sistemas: respiratorio, neurológico, etcétera. el conjunto de nuestra evolución, los humanos hemos estado el 99,9% de nuestra existencia en entornos naturales. Nuestras funciones fisiológicas están adaptadas a este medio”. Como antecedentes a resaltar, en Europa estarían los sanatorios para tratar la tuberculosis, fundados en el siglo XIX ubicados en el seno de grandes bosques centroeuropeos, basaban sus terapias en los efectos positivos de los paseos al aire libre.

La naturaleza y los      baños de bosque

 

  "Trabajo con los elementos" 

 



 

 

Baños de bosque en 

      Sierra Norte

Esta actividad, que consiste en empaparse de la naturaleza con los cinco sentidos, se practica en Japón desde los años 80 para mejorar la salud.

La inmersión en verde, en lugar de en las aguas termales de un balneario o spa, no es nueva. Se llama shinrin-yoku en japonés y su práctica se remonta a los años 80.

"España, es uno de los primeros países de la Unión Europea que promueve la terapia de bosque, pero se anuncia que entre uno y dos millones de japoneses realizan cada año estas sesiones en alguno de los 48 centros oficiales designados por la Agencia Forestal de Japón".

¡No puedo con mi cuerpo! Este estrés arruina mi vida. En fin, no puedo desconectar...

                          

En el transcurrir de la historia, el hombre siempre ha estado en contacto con la naturaleza. Hace medio siglo el 70% de la población mundial vivía en zonas rurales. En 2007 la urbana ya superó a la rural y se prevé que en 2050 dos de cada tres personas vivan en ciudades, según datos de este año del Banco Mundial. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas reclaman "proporcionar acceso universal a espacios verdes, públicos, seguros, inclusivos y accesibles". Quizá la solución a nuestros males sea sencilla: cambiar el tiempo entre pantallas por un paseo respirando en medio del bosque.

 

El shinrin-yoku, en su traducción literal es “tomar la atmósfera del bosque” o “baño de bosque”, es recomendado por los médicos japoneses y de Corea del sur a sus pacientes. En Europa, varios sectores oficiales y programas comunitarios apuestan por sensibilizar al sector médico al respecto. Pues, además, supone un valioso “servicio de salud natural” con coste cero para las administraciones. Respirar aire puro es saludable. Estar en contacto con la naturaleza, ir de excursión, disfrutar de la quietud de un bosque, también. La experiencia propia y la intuición lo corroboran. Ahora, estudios científicos efectuados principalmente en Japón detallan el alcance de los beneficios que brinda sumergirse en este medio.